jueves, 21 de junio de 2018

Calendario

Miro  el calendario donde antes
miraba estaciones
y  me encuentro la rutina
de los días que pasan y no dejan nada.
Recorrer días es recorrer recuerdos
cuando nada los mueve de ser un número en un papel
de colores artificiales.
Siempre me pregunte por qué pintan de rojo  las fiestas,
más alegre es el azul del mar calmo
y más esperanzador el verde de los prados.
 
Se termina la primavera
y la luz se hace inmensa presagiando las hogueras
y Quevedo se hace presente
y Don Quijote cabalga por el agua su dolencia;
qué son cinco siglos que no sean cinco días
¿en cuántos días se resume una vida?
Piensa… piensa… piensa…
y no intentes vivir más allá de lo que piensas
pues caerás en el vacío sin esperanza
que corroe por inercia terrenal  lo que atrapa.
 
Esta  mañana vi llegar el alba
y me pareció tan igual a casi todos los otros
que me puse a pensar en el ocaso
en el que van quedando atrapados mis versos
que sólo son palabras que sin sentido se encuentran
y no sé en dónde se encuentran ni para qué quieren encontrarse
si ya no se dicen nada, más allá del diccionario.
Rumian las vacas y cantan los gallos
es el amanecer iluminando un nuevo día
en el desierto de la soledad.
 
Amanecer, ocaso…
El crepúsculo que viene y se va para volver.
Luces de colores y los colores de las luces
rompiendo grises
sin saber que los grises son los matices,
infinitesimales  matices de los husos
ovillando o enredando vuelos siderales del cerebro
eludiendo los agujeros negros
saltando estrella tras estrella hasta el quásar:
intuido, anhelado, nunca hallado…
 
MASL

domingo, 3 de junio de 2018

Pienso...

Pienso  las veces que la muerte
me toco de cerca y tengo que dejar
de pensar  pues empiezo a contar
las veces que me volverá  a rozar
antes de reposar en el averno.
 
Más de una vez discutí con ella,
que es discutir con una piedra
nunca contesta mas su silencio
acecha con réplica definitiva 
que no escucha quién  se lleva.
 
Siempre inesperada e inoportuna
tuerce la vida y gobierna la fortuna
del arriba santo y el abajo maldito
como maneja el azar que no acierta
en el reparto de sus laureles.
 
Tanta razón le buscamos que
se disfraza de humana condición
olvidando su divina procedencia
para manejar  el tiempo sin tempo
y la congoja, en bruto, sin consejo.
 
MASL
28/05/2018